Ex futbolista de Bolívar y ahora periodista, su historia demuestra que cuando una mujer se la cree, el mundo no tiene más opción que hacerle espacio.
Cuando una niña de ocho años desafiaba los prejuicios en canchas llenas de varones, nadie imaginaba que estaba naciendo una voz fundamental para el deporte femenino boliviano. Hoy, Salma Carrión no solo rompió barreras como futbolista profesional, sino que continúa abriendo caminos desde el periodismo deportivo.
El Fútbol Corre por sus Venas
Desde los cuatro años, Salma ya estaba sentada en las gradas, hipnotizada por el rodar del balón. Pero fue a los ocho cuando decidió que observar no era suficiente: ella quería estar en la cancha.
"Enfrenté mucho machismo, muchas críticas, muchos comentarios negativos que me juzgaban como niña por jugar al fútbol", recuerda Salma sobre aquellos primeros años donde era la única niña en una escuela de varones. Sus propios padres temían por su seguridad, pero ella tenía claro su camino.
El Sueño de Vestir los Colores Celestes
Con la resiliencia como bandera, Salma transformó cada crítica en combustible para sus sueños. "De niña siempre soñaba con jugar en Bolívar, con jugar en Boca Juniors, con representar a mi departamento, representar al país", confiesa.
Y lo logró. Llegar a Bolívar no fue solo cumplir una meta personal, fue rodearse de compañeras que compartían esa misma hambre de gloria. Aunque reconoce que en aquellos años "el fútbol femenino necesitaba mucho apoyo", cada partido era una declaración de que las mujeres pertenecían a ese campo tanto como cualquiera.
El Momento que lo Cambió Todo
Entre todos los trofeos y victorias, hay un recuerdo que brilla con luz propia: el Sudamericano de fútbol tenis en Colombia. "Hemos podido llegar a una semifinal y poder escuchar el himno nacional, poder representar a tu país de esa manera ha sido espectacular", relata con emoción palpable.
Ese instante donde todo el sacrificio cobra sentido, donde "dices que todo vale la pena", se convirtió en el motor para no detenerse nunca.
La Jugada Maestra: Del Campo a los Medios
Mientras sus compañeras se concentraban solo en el balón, Salma jugaba en dos canchas simultáneamente. Consciente de que "el ser futbolista es la carrera más corta que existe en el mundo", decidió estudiar periodismo deportivo sin descuidar su rendimiento en el campo.
"Cuando te organizas, todo es posible", afirma quien logró equilibrar entrenamientos, partidos y aulas universitarias con una disciplina envidiable.
Conquistando el Micrófono en un Mundo de Hombres
El periodismo deportivo presentó desafíos diferentes pero familiares. "No por conocimiento, sino porque es un ambiente muy machista", explica Salma sobre su entrada a los medios, donde muchos aún ven a las mujeres solo como presentadoras de publicidad.
Pero su experiencia en competencias de alto nivel le dio una ventaja única: "Tener el conocimiento desde el campo de juego me ha ayudado un montón". En poco tiempo, su voz se hizo escuchar en paneles deportivos televisivos, inspirándose en figuras como la argentina Morena Beltrán.
El Mensaje que Toda Niña Necesita Escuchar
Para las pequeñas que sueñan con botines o micrófonos, Salma tiene palabras poderosas: "El mayor reto de la mujer dentro del mundo del deporte es creérsela".
Su consejo es contundente: "Si yo sueño con ser jugadora profesional, en mi cabeza tiene que estar que tengo que entrenar todos los días, que jugar fútbol no solo es en la cancha sino también es un trabajo mental, una buena alimentación, ser responsable con mi cuerpo, dejar muchas cosas por enfocarte a tus sueños".
Transformando el Fútbol Femenino Boliviano
Salma no se conforma con su éxito personal. Su visión para el futuro incluye cambios estructurales profundos: más escuelas de formación femenina, profesores capacitados específicamente para entrenar mujeres, campeonatos de larga duración y que los grandes clubes como Bolívar, Always Ready y The Strongest tengan categorías femeninas desde las divisiones menores.
"Hay muchas cosas por hacer, pero todo parte de creer que sí es posible", sentencia.
La Verdad que Nadie Te Dice
"Ningún sueño es fácil, ninguna meta es fácil", admite Salma con la honestidad de quien ha recorrido el camino. Pero añade algo crucial: "Depende de ti hacer el camino más sencillo. Aléjate de personas que no aportan a tu vida, olvídate de las fiestas, concéntrate en lo que quieres lograr".
La historia de Salma Carrión nos recuerda que los límites existen solo para ser superados. Desde aquella niña que desafiaba miradas en canchas masculinas hasta la periodista que hoy amplifica las voces del deporte femenino, su trayectoria es un testimonio vivo de que cuando crees en ti misma, el mundo no tiene más opción que hacerte espacio.
¿Te inspiró la historia de Salma? Compártela con esa niña o mujer que necesita escuchar que sus sueños deportivos sí son posibles. Porque cada vez que una de nosotras triunfa, abrimos el camino para todas las demás.